En
realidad somos uno, "e pluribus unum", mi querida amiga, pero ya tú
sabes hay quienes explotan a los unos por el beneficio de sí mismos, y
solamente por codicia.
No queda más que identificarlos y hacerles ver quiénes realmente son, claro caso de los "madoffs", por ejemplo.
Ahora,
no se necesita para nada la violencia, te acuerdas de Gandhi, pero sí
se necesita ubicarlos, y oponerse a esas 'bestias' humanas porque sino
el daño va seguir siendo el mismo o quién sabe aún peor.
Tal
vez el mundo nunca sea perfecto y ese nunca está bien porque estamos en
el mundo, pero como siempre lo hemos propuesto podemos hacer de éste un
mundo mejor, o por lo menos preservar el mundo que nos lo dieron y que
les quedará a los que están viniendo y que de seguro todavía vendrán así
como vinimos nosotros todos en algún instante sideral.
Tenemos
las facultades para ir escogiendo mejores caminos y métodos para que
todo lo que hay sobre la tierra sea un poquito mejor y lo podemos hacer
dejando de lado a aquellos que especialmente creen, conducen y gestionan
el modelo de la explotación de los seres humanos y todos los recursos
naturales.
Son pocos "los apoderados" que se creen tener
el derecho de apoderarse de la vida de los demás, de los recursos
naturales, y del destino de los demás. Se creen superiores y son unos
retardados sociales y mentales, lo digo porque los he oído hablar como
los he visto obrar, preguntar y también suicidarse, no sin antes haber
jodido a más de la mitad de la gente que conocieron. Esos son débiles
emocionales, que por adentro nos muestran sus sonrisas, el oro en la
puerta de sus casas, su calma medicamentada, pero esconden su malad, sus
ansias de grandiosidad y su enfermedad interna pero venenosa. A esos
insensatos hay que decirles en su cara el mal que han hecho, están
haciendo y podrían seguir haciendo sin ninguna necesidad.
Sí
somos uno, pero hay algunos que se creen que ellos son todo la que vale
en la unidad y los demás para ellos son ceros a la o de la "izquierda",
y esos "unos" son los nobles patrones, los empresarios, que no han
emprendido nunca nada, salvo una minúscula excepción, del poco más o
menos que el 0.99999...% de la población que hay en el mundo. Después
viene el "añadido" que conforman los 98.99999....% que en el mundo de
hoy, son la resta que los imitan, veneran, creen y/o los apoyan. Sí
pues, los apoyan a esos que matan elefantes inocentes, y viven por ser
nobles o vivos (resabidos y torcidos), del trabajo y del sudor de los
demás en castillos y casas protegidas por silos atómicos. Justamente
ellos se ponen abajo para que esos gusanos estén arriba.
Sí
somos del uno como una tontería muy rídicula por su cantidad, pero
todavía aún en nuestra "provincia" estamos divididos, claro tú tanto
como yo, y como muchos por aquí, ahí, allá y acullá, estamos unidos y
somos los que se han convencido por nuestra razón y más que nada por un
corazón que se siente palpitando en cada instante y así mismo se sabe
que debería haber y es posible otra clase de humanidad; empero el caso
real es que somos una unidad y dentro de ella hay una gran diversidad.
Adentro se organizan unas fuerzas minoritarias y de aquellas se enjedran
cada grupo formado por varios intereses que todo es simple y claro no
quieren complicarse, esa gente que cree que lo tiene todo y claro no
sabe ni tiene nada, es la que precisamente conforma de los humanos su
peor bestialidad.
Seguiremos, como lo hicimos en Nueva
York, "arando el mar" ¿te acuerdas", cantaremos alegremente nuestros
trinos, y así nuevos eventos adornarán el alma de nuestros ancestros.
Conformaremos ese tributo a la vida y rendiremos homenaje a nuestros más
sublimes ideales. Seguiremos sembrando con nuestro arado las semillas
de la sabiduría para hacereles sentir a nuestros amigos esa paz interior
que siempre existe dentro de cada mujer y cada hombre de buena voluntad
(lo cual no significa de ninguan manera que sean tontos) que enfrentan
todo en medio de tempestades, crisis o guerras y que a pesar de todo,
navegan tranquilamente respirando el aroma del amor que aún conforma
parte de nuestra naturaleza sin olvidarnos que somos uno y que hay parte
de esa unidad que esta llena de odio, y con mucha falta de tino con
mucha irracionalidad.
Somos de ese uno mucho menos pero
mucho menos que su uno por ciento, pero como hemos seguido, y como ves
ya somos infinitesimalmente un poco más y en proporción directa, ya
también somos mejores por ese mismo infinitésimo.